ATRAER LO FAVORABLE A NUESTRA VIDA

La mente que es consciente de su profundidad es capaz de ver la magia que hay en el mundo.

Con la sabiduría del dragón y la ausencia de ego nos situamos en un inmenso espacio abierto y dejamos de seguir los engaños de la dualidad. Somos entonces sensibles a las energías que nos rodean porque tenemos nuestros sentidos abiertos a todos los aspectos de la vida. Al acoger el sufrimiento de los demás combinamos la sabiduría intuitiva y las acciones prácticas de la compasión. Tenemos una energía interior poderosa, un caballo de viento potente, que nos hace encontrarnos cada día con los aspectos favorables de la vida.

Al llegar a este punto del camino, podemos ver claramente las situaciones en que nos encontramos y el momento más oportuno para que nuestras iniciativas se desarrollen con éxito. Al sintonizar con nuestro entorno, recibimos una respuesta del mundo indicándonos si nuestras decisiones son acertadas o no, cerrándonos el paso o facilitándonos lo necesario para seguir avanzando.

Todo es interdependiente, nada aparece por casualidad, por eso, cuanta más sabiduría y compasión incorporemos a nuestra vida, más favorable será todo en nuestro camino. Es como un regalo del universo. Si nos comportamos virtuosamente, interesándonos realmente por los demás y ayudándoles con diligencia, encontraremos que nuestra vida se llena de armonía y buena suerte.

Las circunstancias favorables nos llevarán a la alegría y la libertad, propiciando la comprensión y realización de todas las cosas, según avanzamos en nuestro camino. Cuando la mente es consciente de su verdadera profundidad es capaz de ver la magia que hay en el mundo, y éste se comunica con nosotros porque estamos preparados y abiertos a él. Cuando incorporamos sabiduría y compasión a nuestra vida, sintonizamos con el mundo y nuestro entorno nos responde.

Cada situación favorable que encontramos a nuestro paso nos está mostrando cómo seguir avanzando hacia el despertar. Vemos cómo se combinan las causas y condiciones y sabemos si ha llegado el momento de actuar o de esperar. Si estamos abiertos y conscientes para ver lo que nos está ofreciendo el mundo, veremos con claridad si es el momento adecuado de realizar un viaje, iniciar un nuevo proyecto, comenzar unos estudios o hacer un cambio en nuestra vida.

Pero es difícil poder percibir las señales que nos da el mundo si nos enfrentamos a las dificultades con agresión, pensando que vamos a conseguir las cosas por la fuerza, porque nos volvemos orgullosos y obstinados cegados por la confusión. En cambio, los acontecimientos favorables nos están indicando que la mente está relajándose y que estamos presentes aquí y ahora. Cuando nos relajamos nos damos cuenta que lo único que tenemos realmente es el momento presente. El pasado es tan sólo un recuerdo que evocamos en este momento, y el futuro es tan solo una proyección de nuestro presente. La sabiduría del dragón nos ayuda a reducir la velocidad, a soltar los apegos y ser conscientes del momento presente, porque es precisamente ahí donde está el poder y la magia del mundo que atrae lo favorable a nuestra vida. 

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