DESCONOCER LA UNIDAD

Desconocer la Unidad es dejar los extremos sin sentido, dejar que pierdan su función

Cuando solo observamos los extremos sin darnos cuenta de la unidad que los une a ambos, y de la que forman parte, estamos dejando que se pierda la función que tiene cada uno de ellos. El calor y el frío son extremos de una misma unidad, pero tienen funciones diferentes. El fuego y el agua son elementos diferentes, podemos decir que dos extremos, pero ambos son naturaleza y forman parte de la unidad del universo. El fuego evapora el agua, el agua apaga el fuego. La tierra soporta a ambos.

Ningún extremo de una dualidad es independiente por si mismo, depende del otro, y están unidos entre sí por la unidad que los abarca a los dos. Su interrelación les da sentido y los mantiene en su función, quemar, apagar, refrescar, mantener, caldear. Si sólo nos quedamos con un extremo, ignorando la unidad, estamos dejando sin sentido su función aislada del Todo, no tiene sentido sin su complementario, no puede realizar su verdadera función si lo concebimos desconectado e independiente, cuando en realidad no lo es.

Cuando vivimos sin concebir la Unidad estamos viviendo en las diferencias, estamos separando y destruyendo la verdadera riqueza de la vida.

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