RESPONSABILIDAD


A menudo hay personas que expresan su deseo de poder tener una comprensión más profunda de la vida. ¿Por qué algunas personas parecen tener esa comprensión, y otras no parecen comprender tanto? Puede parecer injusto, pero la comprensión no llega así porque sí. La vida diaria nos está probando constantemente para ver si podemos hacernos responsables de un nivel más profundo de realización. Podríamos decir que la vida es un campo de pruebas para la responsabilidad de la realización.

Por supuesto que todos cometemos errores. Todos nos olvidamos de ser agradecidos. Pero si recuerdas constantemente este principio, trayéndolo de vuelta a tu conciencia una y otra vez durante el día, entonces realmente no importa si cometes errores. Te recuperarás. No es una catástrofe si te caes alguna vez. Si caes, te vuelves a levantar. La forma en que progresamos es cometiendo errores y aprendiendo de ellos, así que no es el fin del mundo. Cometer un error, en este sentido, significa que has olvidado ver esto como un privilegio. Has olvidado que has recibido un regalo. Cualquier cosa en la que estés involucrado, es un regalo por el que tienes que estar agradecido y debes apreciarlo, sin importar lo difícil que sea. Si lo haces, entonces verás cosas que nunca habrías visto de otra manera. La única forma de verlas es atravesar ese fuego de la dificultad hasta llegar al otro lado. Es ese trabajo el que produce el rasgo de carácter que conocemos como madurez.

Cuando pensamos en hacernos responsables, sólo en el sentido más mundano pensamos en hacernos responsables de nuestros actos. Eso es lo que queremos decir cuando estamos criando a los hijos, o en un sentido general en nuestra sociedad cuando decimos “tienes que ser responsable”. Pero a lo que nos referimos en este caso es algo mucho más profundo.

“Responsable” viene de la palabra respuesta. Responsable es “ser capaz de responder”. Esa es la raíz de la palabra. A veces es útil buscar el origen de una palabra, porque a menudo nuestro uso social de ella, a través de los años, ha evolucionado en algún tipo de comprensión general del uso de la palabra que en la actualidad no está tan conectada con la palabra original. Y, en este sentido, realmente nos revela algo: que sólo podemos ser responsables en el momento presente. No puedes responder en el pasado o en el futuro, sólo puedes responder ahora. Y de hecho hay una conexión de la palabra “gratitud” con esto, porque si no estamos en un estado de gratitud, si no estamos apreciando lo que sea que surja en nuestra vida, no podemos responder. A veces decimos “ten una mente positiva”, que básicamente significa una mente de gratitud y aprecio con lo que sea que surja en la vida. 

Si tenemos una actitud negativa, siempre tiene su origen en algo que tenemos miedo que suceda en el futuro o en algo que sucedió en el pasado. Toda la negatividad viene de otro momento que no es el presente, nunca sucede ahora. Bueno, puede suceder ahora en forma de reacción, y a menudo lo hace, pero reaccionamos negativamente ante algo que aparece porque tenemos miedo de que suceda algo que estamos intentando evitar, o porque queremos que suceda algo y estamos preocupados de que no pueda suceder. “Quizá no consiga ese dinero. Es posible que no consiga que esa persona haga lo que quiero que haga. Recuerdo que esta persona hizo eso la última vez y tengo miedo de que vuelva a suceder”. Ese tipo de pensamientos siempre conducen a la negatividad y siempre impiden la responsabilidad.

La diferencia entre reaccionar y responder es que, cuando reaccionamos ante algo, siempre es previsiblemente negativo. La reacción siempre viene de una preocupación por el pasado o el futuro. Si es positivo, es una respuesta. Es posible que puedas encontrar algún tipo de reacción que pienses que no es así, pero tal vez es porque no estás usando la palabra “positivo” con el mismo sentido que le estamos dando en este caso. Por ejemplo, puedes pensar que es positivo alguien que es alegre habitualmente, compulsivamente, o alguien que, sin importar lo que le digan, siempre dice “Oh sí. Yo también lo creo”. Cuando reaccionas por hábito de cualquier manera, estás evitando alguna confrontación o dificultad con la otra persona, que temes te produciría una sensación incómoda. Ser tan alegre puede parecer algo positivo, pero en este caso es negativo porque no es una respuesta, sino una reacción habitual. Las reacciones habituales siempre vienen de nuestro condicionamiento.

Incluso cuando tenemos miedo de que algo va a suceder en el futuro, también eso surge de nuestro condicionamiento. Por ejemplo, si alguien está convencido de que no se puede confiar en ti, entonces todo lo que digas a esa persona lo va a poner en tela de juicio. Así que siempre va a reaccionar ante ti, y no será capaz de responder mientras siga creyendo eso, porque siempre tendrá un prejuicio sobre todo lo que puedas decirle en el futuro.

Mientras funcionemos, o reaccionemos por nuestra historia personal, nuestro propio conjunto de condiciones (y todos tenemos una combinación diferente) siempre será negativo, y nos causará algún problema. Causará más desequilibrio, y como poco, causará más de lo mismo en el futuro. A esto se le llama la evolución del karma. La forma en que reacciones hoy seguramente volverá a ocurrir mañana. Si ves las cosas de cierta manera, tiendes a perpetuar esa manera de verlas. Así funciona el ser humano. Pero si seguimos practicando más y más, seremos capaces de simplemente estar presentes sin importar lo que surja.

Si hacemos esto, observar lo que surja sin prejuicios y sin reaccionar, no crearemos más karma en el futuro, no estaremos sembrando semillas que germinarán más tarde en forma de obstáculos y problemas. Podremos entonces responder de manera efectiva con lo que sea necesario hacer en el momento presente. A eso es a lo que en este caso llamamos “hacernos responsables” o “ser responsables”.

¿Qué queremos decir con realización? Libertad. Libertad de esas condiciones reactivas, libertad de nuestros hábitos, libertad de nuestra forma habitual de ver la vida guiados por nuestras creencias, libertad de todas las suposiciones que hacemos. Se puede decir que libertad es un buen sinónimo de realización. Entonces ¿qué significará ser responsable de eso?

Significa aparecer, estar presente. Aparecer significa estar aquí, no solamente con tu cuerpo físico sino con atención y en un estado dispuesto a responder, en lugar del estado habitual de comparar, pensar, preguntarte, intentar imaginar, poniéndote tú mismo en medio de tu propio camino. Si dejamos todo eso, la respuesta natural es la realización de la libertad. Si soltamos todas esas cosas, ya no estamos agarrándonos a algo desesperadamente. 

Puede ser un poco incómodo al principio, porque nos quedamos sin todos nuestros apoyos. Nos quedamos sin todo de lo que dependemos para sentir “Yo soy esta persona que conozco sentada aquí en este cuerpo. Tengo esta educación y esta comprensión, y aunque estoy aquí para practicar, básicamente estoy aquí para mejorar este conocimiento que ya tengo”. Tienes que soltar todo eso, soltar todo lo que has acumulado. Pero, de hecho, cuando lo sueltas no se va a ningún sitio, sigue estando ahí para usarlo cuando sea necesario, pero como respuesta, no como esclavos de una condición en la que no puedes hacer otra cosa que reaccionar.

Así que la clave de la práctica es aprender a estar presente y a ser responsable ante cualquier situación que surja, sin suposiciones sobre ella, sin proyecciones, sin exigencias, sin requisitos, sin poner ninguna condición en otra persona.




Más abajo puedes dejar un comentario sobre lo que te ha parecido esta publicación y también sugerir algún tema sobre el que te gustaría leer en futuras publicaciones. Gracias por tu colaboración.





Comentarios

  1. Uf, esto me toca muy de cerca. Hay mucho trabajo que hacer en este área... ^^U

    Muchas gracias por tu guía ^^

    ResponderEliminar
  2. Sí, nos queda mucho trabajo que hacer, mucho camino que recorrer, aunque vale la pena seguir adelante, aprendiendo y descubriendo lo que somos capaces de hacer, lo que somos capaces de soltar, lo que somos capaces de abrir nuestro corazón hasta acoger en él al universo entero.
    Gracias por seguir adelante experimentando y aprendiendo en este camino.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Gracias por tu colaboración.